Una vez Macron informó que mínimo hasta mediados de julio no podría haber aglomeraciones en espectáculos deportivos o de cualquier otra índole en Francia, ASO, y la UCI movieron hilos rapidamente y, visto lo visto, a unos y a otros les interesa bien poco el ciclismo, les interesa en cambio, y mucho, el Tour.
Es cierto, y eso no lo va a negar nadie, que el Tour es la carrera por excelencia del calendario ciclista, y que todo, en una temporada normal, gira en torno a la Grande Boucle, pero esta no es una temporada normal, y todos, si quieren salvar la temporada deben poner de su parte, pero sí, todos van a poner de su parte para que el Tour se celebre en unas fechas normales, unas fechas que le corresponden a la Vuelta, y esta, dependiente de ASO no iba a poner piedras en el camino del hermano mayor e iba a replegarse a lo que se dijese desde Francia.
Así, el Tour se celebrará del 29 de agosto al 20 de septiembre, manteniendo las etapas previstas. Unas fechas idóneas para el ciclismo, como se he venido demostrando en los últimos tiempos en la Vuelta. Después del Tour se celebrarán los Campeonatos del Mundo, de hecho, comienzan el mismo día que el pelotón llega a los Campos Elíseos. Y después de ahí? Pues después a ver cómo vienen los tiempos y cómo va a evolucionar la pandemia del Covid-19 cuendo de nuevo llegue el otoño. De momento se ha previsto que el Giro se celebre en octubre y que la Vuelta se celebre en octubre, y mientras tanto, los Cinco Monumentos deben buscar también fechas entre octubre y noviembre para celebrarse. Vamos, ideal todo.
Estos últimos años, octubre ha sido un mes suave metorológicamente hablando, incluso noviembre puede serlo, pero también hay que tener claro que las horas de luz no son las mismas y que ciertas etapas, tanto en el Giro como en la Vuelta corren el riesgo de ser neutralizadas por fenómenos adversos, y es que en Alpes o Pirineos puede venirte un otoño invernal, con lo que ello supone en la alta montaña.
En algunos mentideros ya se está planteando, con toda lógica, por otra parte, que la Vuelta comiencen en Irún, dejando fuera el periplo que estaba previsto por Utrecht, y que la carrera quede en 18 etapas. Veremos.
Ahora tenemos ante nosotros un calendario lleno de especulaciones, y todo pendiente de la evolución del Covid-19, que esa es otra, solo tenemos claro que el Tour se celebra en unas fechas propicias, y que el resto, ya se verá, pero que la UCI les ha venido a decir al resto de carreras me importais una mierda mientras haya dinerito en la France...
